Fuente: Bio Bio

Una compleja situación viven funcionarios y usuarios del principal hospital de la región de Valparaíso, debido a que producto de la pandemia y el distanciamiento social que debe haber entre pacientes, quitaron 120 camas, lo que se tradujo en que ahora trabajadores de la salud deban mantener en sillas a los usuarios o incluso en el suelo para recibir la atención médica. Indica la nota de Bio Bio.

Así lo indicó Eduardo Ojeda, dirigente de Fenats en el mencionado recinto, quien además señaló que el 30 de noviembre finaliza el contrato honorario de 300 funcionarios destinados a pacientes con covid-19.

Además, según denunciaron desde la organización gremial, no estaría funcionando el policlínico, donde se realizan los controles médicos a personas con cáncer, problemas renales, o cardíacos. Cuando esos pacientes tienen alguna molestia deben ir a Urgencias con el peligro de contagiarse de covid-19.

Por su parte, Rodrigo Riveros, subdirector médico del Carlos Van Buren, confirmó que hubo una baja en la cantidad de camas y explicó que es consecuencia de las medidas sanitarias adoptadas por la pandemia.

El subdirector médico también indicó que están desarrollando un plan de mitigación para poder habilitar nuevos espacios con camas en el hospital y así poder mejorar la situación.