Fuente: Meganoticias

Quienes tienen esta teoría no están muy lejos de la realidad. Y es que, al menos, desde el punto de vista del Feng Shui este espacio debe ser el centro de casa, pues es una instancia que ocupa un lugar primordial en lo que respecta a la familia. Se describe en la nota de Meganoticias.

De hecho, la revista ¡Hola! sostiene que “la tendencia a abrir e integrar las cocinas a crear zonas de estar en ella (los offices) responde a esa necesidad de convertir este espacio en un punto neurálgico de la vida en familia. Preparar la comida, participar, hacerlo entre varios, disfrutar de las anécdotas del día, hacer los deberes? En la cocina se hace mucho más que cocinar”.

La orientación de la cocina

Una cocina con buen Feng Shui nos carga de energía positiva y nos hace sentir más vitales y creativos. Es por esto que su mejor ubicación es la zona más alejada de la puerta principal y de la puerta del baño, porque se debilita la energía vital.

Por otra parte, y según el portal especializado en hogar elmueble.com, la zona de cocción no debe estar a espaldas de la puerta.

Si tu cocina se ubica en esta posición, los especialistas de este filosofía china recomiendan coloca un espejo o un salpicadero de acero reflectante para que haga la función de retrovisor y evitar la sensación de alerta. Sostiene la nota de Meganoticias.

La zona de aguas debe estar debidamente separada de la de fuegos (la distribución en triángulo de trabajo es la mejor para que el elemento agua no apague al elemento fuego) y las islas ( o espacios vacíos en el centro) son perfectas para fomentar la libertad de movimientos.

En cuanto a los materiales a elegir, el tener una cocina en la que predomine la madera alimenta el fuego. Equilíbrala con el metal y el barro cocido o la arcilla aportarán el elemento Tierra. Incorpora plantas aromáticas para potenciar una energía fresca y vibrante. Señala la nota de Meganoticias.

Finalmente, y si eres fan de las cocinas blancas, piénsatelo dos veces porque a nivel de Feng Shui no son lo más recomendable ya que implican un exceso de frialdad e introversión.